El 29 de junio de 1815, día de la Independencia Argentina Año 7. Edición número 320. Domingo 6 de Julio de 2014 Por  Marcelo Gullo. Miembro de Número del Instituto Nacional Manuel Dorrego sociedad@miradasalsur.com Usted lector, al ver el título de esta nota habrá pensado en el tremendo error cometido por el diario o, peor aún, por el autor de la nota. Pero, en realidad, no se trata de ningún error, sino de nuestra intención de hablar justamente, cuando nos aprontamos a festejar el 9 de julio, de la otra independencia, de la declaración de independencia olvidada, de la declaración de independencia borrada de la historia por los vencedores de Caseros y los escribas de la historia oficial. Para nosotros la primera declaración de independencia se realizó 29 de junio de 1815. Veamos entonces los hechos que sustentan nuestra opinión. Importa destacar que ese mismo año de 1815, en que Carlos María de Alvear propone que las Provincias Unidas del Río de la Plata se constituyan en colonia formal de Gran Bretaña, José Gervasio Artigas, a fin de cumplir con el gran mandato que se le había encargado a la Asamblea del año 13, es decir, declarar la independencia, se dirigió a las provincias no sujetas al poder angloporteño –Córdoba, Santa Fe, Corrientes, Misiones y la Banda Oriental– a fin de que enviaran sus representantes a la actual ciudad entrerriana de Concepción del Uruguay –llamada por entonces Villa del Arroyo de la China– para que reunidos en un gran Congreso, declararan la Independencia de España y de todo otro poder extranjero. A fines de junio se congregaron, entonces, en la Villa del Arroyo de la China, los diputados Pedro Aldao y Pascual Diez de Andino, provenientes de las provincias de Santa Fe, Juan Francisco Cabral, Ángel Mariano Bedoya, Serapio Rodríguez, Juan B. Fernández y Sebastián Almirón, por Corrientes; Andrés Yacabú, por Misiones; el doctor José Antonio Cabrera, el doctor José Roque Savia, José Isasa y el presbítero Doctor Miguel del Corro, por Córdoba; el Doctor José Simón García de Cossio (representante del “continente de Entre Ríos”), y Justo Hereñú (por la villa de Nogoyá), por Entre Ríos, y Francisco Martínez, Pedro Bauzá y otros, por la Banda Oriental, para declarar la Independencia absoluta de España, tratar la organización política de los Pueblos Libres, el comercio con el extranjero, el papel de las comunidades indígenas en la economía de la Confederación, la política agraria y la posibilidad de extender la Confederación al resto del ex virreinato. El 29 de junio de 1815, el Congreso del Arroyo de la China –también conocido como Congreso de Oriente–, atento a la situación de la vuelta de Fernando VII al poder y a los continuos avances de los portugueses en la Banda Oriental, procedió a declarar la Independencia de España y de toda otra potencia extranjera y a adoptar como identificación de la nación la bandera, azul y blanca –creada por Belgrano a orillas de río Paraná– con una franja roja cruzada. Ésta, fue la primera Declaración de Independencia de las Provincias Unidas del Río de la Plata pero, tan importante acontecimiento fue ocultado por la historia oficial escrita por Mitre y borrado de la memoria de los argentinos. Con gran sagacidad apunta el historiador Pacho O’Donnell: “Cabe señalar que, salvo la escuálida representación enviada por Córdoba –que enarboló ideas federalistas–, ninguna de las provincias que conformaban la Liga de los Pueblos Libres concurrió al Congreso de Tucumán en 1816, por lo cual sigue siendo motivo de debate cuál de las dos asambleas alcanzó mayor representatividad.”. I